La artrocentesis como tratamiento de la luxación discal sin reducción en fases tempranas de la ATM

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La luxación discal sin reducción es un trastorno clínico en el que el disco presenta una luxación, generalmente anteromedial, respecto al cóndilo mandibular y no vuelve a la posición normal al cerrar la boca. La exploración nos revela una limitación (bloqueo) de la apertura mandibular (25 a 30 mm), con un movimiento excéntrico normal en dirección homolateral y limitado en dirección contralateral.

A menudo, los pacientes conocen el momento exacto de su inicio, ya que se produce un cambio súbito en la amplitud del movimiento mandibular que es claramente evidente. La historia clínica suele revelar un aumento gradual de síntomas intracapsulares (ruidos y bloqueos momentáneos) previo a la luxación discal, los cuales desaparecen tras la aparición de este trastorno.

Cuando la luxación discal sin reducción es un proceso agudo, el tratamiento inicial debe incluir un intento de reducción o recapturación del disco mediante manipulación manual. Ésta suele ser muy eficaz en los pacientes que experimentan un primer episodio de bloqueo, ya que la probabilidad de que en estos casos los tejidos estén sanos y no muestren cambios morfológicos es elevada. No obstante, si el cuadro es grave, con mucha inflamación y/o una elevada presión negativa en el interior de la articulación debido a una sobrecarga de ésta, a pesar de conseguir reducir el disco manualmente, al cerrar el boca el disco se luxa de nuevo.

La artrocentesis es una técnica quirúrgica mínimamente invasiva que consiste en la colocación de 2 agujas en la articulación temporomandibular (ATM) para lavarla y romper pequeñas adherencias. Su éxito tiene varias explicaciones potenciales. En las luxaciones discales, suele existir una presión negativa importante en el interior de la articulación que provoca un efecto de «copa de succión» que dificulta la retracción del disco por parte de los tejidos retrodiscales. La distensión de la articulación elimina esta presión. Además, en casos de luxaciones más crónicas, suelen desarrollarse adherencias entre el disco y la fosa articular e inflamación importante de los tejidos intracapsulares. La simple acción de lavado de la articulación puede eliminar o disminuir los factores bioquímicos que contribuyen a la inflamación y el dolor, y a romper pequeñas adherencias que dificultan el movimiento del disco. Asimismo, las infiltraciones de ácido hialurónico (AH) que suelen complementar a la artrocentesis favorecen unos mejores resultados. Gracias a sus propiedades lubricantes, mejora la viscoelasticidad del líquido sinovial y disminuye la fricción entre las superficies articulares, impidiendo de este modo la formación de nuevas adherencias que dificultan el movimiento discal. Su acción antiinflamatoria también contribuye a la reducción de ésta y del dolor.

En casos de luxaciones discales no reducibles agudas y subagudas, donde los tejidos retrodiscales todavía conservan su elasticidad y potencial para poder retraer del disco articular, la artrocentesis puede reposicionar el disco a su lugar normal, gracias a la eliminación de la presión negativa intra-articular con la «dilatación» de ésta, la eliminación de los factores bioquímicos inflamatorios y el incremento de la viscosidad del líquido sinovial por la inyección de AH. No obstante, en casos crónicos donde los tejidos retrodiscales se vuelven más fibrosos, la reducción se vuelve mucho más improbable, aunque el cuadro igualmente mejora.

Se presenta el caso de una joven de 25 años que acudió a nuestra clínica con un cuadro de “bloqueo cerrado” de 4 meses de evolución. Nuestra paciente se presentó con una gran limitación de la apertura bucal, la cual solamente era de 30 mm, y una desviación durante ésta hacia el lado derecho. El bloqueo apareció de forma súbita y, además, sentía dolor articular en el lado derecho si se intentaba abrir forzadamente la boca. Nuestra paciente relató que, previo al bloqueo, había padecido una larga historia (años) de ruidos articulares en cada ciclo de apertura-cierre de la boca. Tras una atenta exploración se diagnosticó un cuadro de luxación discal sin reducción en fase subaguda en la articulación temporomandibular (ATM) derecha.

Mediante técnicas de fisioterapia articular (manipulación manual) se redujo con éxito el disco luxado, consiguiendo de este modo una apertura de 40 mm, pero en el momento de cerrar la boca, apareció de nuevo el bloqueo y el dolor. Por ello, el tratamiento propuesto fue efectuar una artrocentesis junto con una infiltración intraarticular de ácido hialurónico. El resultado fue excelente, obteniendo la eliminación completa del bloqueo, del dolor y de los ruidos articulares que había padecido durante años previos al episodio. La aplicación del tratamiento en una fase temprana del cuadro influyó muy positivamente en su éxito.

Artrocentesis de la ATM derecha de la paciente

Inyección de ácido hialurónico tras finalizar la artrocentesis

Situación inicial del caso. La apertura se limita a los 30 mm

Situación tras finalizar la cirugía mínimamente invasiva. La apertura alcanza los 40 mm